¿Por qué la raza gitana le da tanto valor al oro?

¿Por qué la raza gitana le da tanto valor al oro?

¿Por qué la raza gitana le da tanto valor al oro?

Ver a personas de etnia gitana como compradores de oro en el centro de Madrid es una estampa bastante habitual. Incluso entre los miembros más pobres de la comunidad las joyas de este material son comunes traspasándose entre distintas generaciones, tanto entre hombres como en mujeres. El amor de los gitanos por el oro tiene una explicación histórico-antropológica que tiene que ver con su naturaleza nómada.

Cuando vemos en tiendas como Rejoya a personas de etnia gitana comprando oro tenemos que ser conscientes que estamos observando una costumbre de siglos, que se ha mantenido a lo largo de la historia. Los gitanos han tenido un largo éxodo desde que salieron de la India, en un momento histórico aún indeterminado. Históricamente, las poblaciones gitanas han recorrido Europa con sus campamentos siendo expulsados de forma violenta en muchas ocasiones.

La mejor forma que tenían de llevar la riqueza que habían conseguido acumular a lo largo de los años consigo era convirtiéndola en joyas que nunca tuvieran que soltar. Mientras que los pueblos sedentarios construían grandes palacios, los nómadas preferían cosas de valor que les acompañaran y que no peligraran si les echaban de alguna población, por eso hicieron de las joyas de oro uno de sus complementos favoritos.

Cuando vemos a gitanos haciendo de compradores de oro en el centro de Madrid estamos siendo testigos de una costumbre que pone de manifiesto el carácter nómada que tradicionalmente acompañó a esta etnia. Pese a que en el último siglo la mayor parte de la población ya sea sedentaria, aún mantienen esa costumbre de sus ancestros que les enseñaron a llevar encima todos sus elementos de valor por si tenían que salir corriendo. 

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